lunes, 18 de febrero de 2008

ENTREVISTA / DIRECTOR DEL CENTRO PALESTINO PARA DERECHOS HUMANOS / GAZA

-La presente entrevista se publicó en el Diario SUR, de Malaga el 10 de febrero de 2008, y, como me parece pueda tener interés para los lectores del blog de los Hispanistas de Tánger, se la remito por si considerara oportuno publicarla.
Saludos cordiales.
Antonio Mesa Muñoz.

DIRECTOR EN GAZA DEL CENTRO PALESTINO PARA LOS DERECHOS HUMANOS
Raji Sourani: «La situación en Gaza puede estallar en cualquier momento»
«No se puede pedir que sean buenas víctimas a aquellos que están siendo machacados, que están rotos y desesperados». «Es el año más duro para los palestinos desde la ocupación»

MARÍA DOLORES TORTOSA

Para Raji Sourani, el destino le ha venido marcado por su condición de palestino criado en Gaza, uno de los territorios del Oriente Medio de mayor tensión en el mundo.
Abogado de 53 años, dirige el Centro para los Derechos Humanos de Gaza, un observatorio desde el que no sólo defiende la frágil y difícil situación del más del millón y medio de palestinos que sobreviven en la Franja, sino también desde el que alzar la voz para clamar por el fin de una guerra que dura más de la edad que tiene. En el año en que se cumple el sesenta aniversario de la proclamación del estado de Israel y, por tanto, del inicio del conflicto palestino-israelí, y 41 de la ocupación judía de los territorios de Gaza y Cisjordania, Sourani clama por un fin dialogado de la contienda que incluya a Hamas. Advierte de que la situación en Gaza es extrema, muy delicada, y puede estallar en cualquier momento. Cuéntenos cómo se vive en Gaza ahora mismo.La situación ahora mismo de la violación de los derechos humanos en Gaza no tiene precedentes. Gaza tiene 650 kilómetros cuadrados, donde viven 1.700.000 habitantes, que están sometidos a un asedio sin precedentes, donde continuamente se dan bombardeos, asesinatos. La vida allí es una lotería, vas en un coche y ves como delante tuya o detrás alguien puede caer muerto. Esto es todos los días. Llevamos nueve meses prisioneros. Más de 90 personas han muerto por no poder salir para recibir tratamiento médico, da igual que tengan dinero o no, no lo pueden conseguir. Es cierto que dos meses después de la conferencia de Annapolis la cifra de muertos sigue creciendo. Usted que vive allí, ¿qué repercusiones ha tenido dichos acuerdos sobre el terreno de Gaza?La situación se ha deteriorado mucho, es peor desde la conferencia de Annapolis y desde que Bush visitó la zona. Ya no solo hablamos de que haya asesinatos selectivos o destrucción de viviendas, sino de miles de personas que carecen de lo más básico, alimentos y medicina. Parece que hay luz verde para lo peor. Este, sin duda, es el año
más duro para los palestinos, el año que acumula más sufrimiento y más dolor. Es el peor para la población civil desde la ocupación.Parece entonces que la ayuda internacional no sirve de mucho.Hasta ahora todas las conferencias han fracasado, desde el proceso que se inició en 1991 en la Conferencia de Madrid, hasta ahora, donde se vive una auténtica situación de 'apartheid', en todo este tiempo, la población es la que sufre, la que está en el ojo de la tormenta. Todos los acuerdos y todos los procesos desde 1991 lo único que están consiguiendo es que Palestina, un lugar con un censo de población universitaria altísimo, trabajadora, con un nivel empresarial alto, se esté convirtiendo en una población de mendigos, que viven sólo de la ayuda internacional. El 90% vive bajo el umbral de la pobreza y el 70% está en paro.¿Cuáles, en su opinión, son las causas de tanto fracaso de la comunidad internacional?En 2005 y 2006 hubo unos procesos electorales completamente limpios, con la presencia de la comunidad internacional, cuando se eligió al presidente Abbas y al primer ministro Hanniya. Sin embargo, desde que Hamas ganó en enero de 2006, el pueblo ha sido castigado. Estados Unidos ha dotado a Israel de una absoluta impunidad en sus acciones y Europa guarda silencio. Impera la ley de la selva, donde Israel tiene licencia para matar. Bin Laden aplica la ley de la selva e Israel también. ¿Qué hace Europa?, ¿dónde está la fábrica moral de Europa, su defensa de la democracia? Nos sentimos traicionados por los gobiernos europeos. Hay una carencia absoluta de voluntad de llegar a la paz. Nadie habla de que se sigue la construcción del muro, de los 600 puntos de control militar en Cisjordania, nadie habla del proceso de judaización de Jerusalén, de su limpieza étnica,
de los asentamientos, nadie habla de eso, sólo de llevar un poco de comida a una población asediada para que no muera de hambre, esto en el sesenta aniversario.Sin embargo, la guerra abierta entre Al Fatah y Hamas no ha mejorado mucho la imagen internacional de los palestinos, en cierto modo parece haberle dado la razón a Israel.Cuando murió Arafat todo el mundo pensaba que cada cinco palestinos se enfrentarían a otros cinco, sin embargo hubo un proceso limpio y legal de traspaso de poderes, tanto de la OLP como de la ANP. Me siento muy orgulloso de este proceso, de esta transición.
Pero cuando Hamas ganó las elecciones, la comunidad internacional no lo aceptó, vimos
cómo se empezaron a filtrar armas y a promover una situación de república bananera,
para desestabilizar la situación. Esto nos dolió, nos daba vergüenza, no pensábamos que las armas para defendernos se iban a utilizar para una guerra entre hermanos, eso nos ha llevado a una reflexión, no somos distintos del resto del mundo, una guerra civil ocurre en otros muchos puntos. Hay poderes que presionan a Abbas para que no dialogue con Hamas. Lo cierto es que hay una nueva escalada de violencia, incluso vuelven los ataques suicidas.Estoy muerto de miedo no sólo por la situación. Al imperar la ley de la selva, no se les puede pedir a los palestinos que sean buenas víctimas. Por alguna extraña razón, hay
una sangre sagrada y otra que no lo es, cuando hay una víctima israelí todo el mundo clama porque se respete los derechos humanos, pero cuando las víctimas son palestinos, nadie dice nada. No se puede pedir que sean buenas víctimas aquellos que están siendo machacados en una situación de pobreza, de marginalidad, que están rotos y desesperados. Hay que actuar antes de que sea demasiado tarde, porque Oriente, no
sólo Palestina, está bullendo y hay una gran tensión. La situación es muy delicada, puede estallar en cualquier momento.
¿Cuál, en su opinión, es la solución?El diálogo entre todos, esa es la solución. ¿Cómo se puede conseguir el final del conflicto sin el diálogo con Hamas?¿Y qué condiciones, según usted?Algo muy sencillo, simplemente, lo que pasa allí es la ley de la selva, cuando lo que queremos es que se cumpla la legalidad internacional, que se respete la Convención de Ginebra, que se acabe la ocupación. Ya son bastante 41 años de ocupación. No necesitamos dólares, ni euros, ni más limosna, lo que necesitamos es la libertad, que se acabe la ocupación, se abran las fronteras, podamos ocuparnos de nosotros mismos, que sabemos hacerlo.¿Ve a Tony Blair la persona adecuada como mediador del conflicto?
La oficina del señor Blair en Jerusalén se puso en contacto conmigo el 31 de agosto para
que fuera a una entrevista con él el 12 de septiembre. Yo les dije, bien, pero vayan preparándolo todo con tiempo para que los israelíes me dejen salir. Ellos me dijeron, pero qué está diciendo, le llamamos en nombre del representante del Cuarteto, prepárase que sale ese día. Al final no me dejaron salir de la Franja y trasladarme a
Jerusalén, como me temía. Esa situación refleja la influencia del señor Blair. Ha habido catorce primeros ministros que han intentado verme en Ramala y no lo han conseguido. Los diplomáticos deberían tener más dignidad.¿Qué expectativas tiene sobre una solución?Vamos a seguir luchando, somos fuertes moralmente, sobre todo porque defendemos la
causa justa, el día más bonito no ha llegado y estamos dispuestos a esperarlo.
-La presente entrevista se publicó en el Diario SUR, de Malaga el 10 de febrero de 2008, y, como me parece pueda tener interés para los lectores del blog de los Hispanistas de Tánger, se la remito por si considerara oportuno publicarla.
Saludos cordiales.
Antonio Mesa Muñoz.